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Este Domingo cubierto por la niebla,
he dormido hasta avanzadas horas del mediodía,
El teléfono me trajo noticias de mi amiga Celeste,
bastante afectada por la niebla y necesitada de mi compañía.
Entusiasta invadí la cocina de mi madre,
para preparar nuestro almuerzo,
Tras comer con las dos mujeres que más quiero,
Celeste y yo fuimos a dar un paseo por la costanera,
charlamos sobre nuestras relaciones con el sexo opuesto,
nuestros proyectos y nos lamentamos por habitar en un país
tan machista y censurador.
El mar estaba hermosamente ondulado y grisáceo,
Nos estabamos riendo como locas de
nosotras mismas, porque sentido del ridículo
es algo que poseemos a granel.
De pronto, sentimos una bulliciosa e infantil melodía,
Curiosas, nos acercamos a su origen,
De sopetón nos encontramos hipnotizadas
ante un Circo de Títeres itinerante,
Nuestras almas de niñas se vieron atrapadas
por las aventuras del cocódrilo y la vaquita protagónicos.
El frío y la humedad del lugar dió paso a una mágica tibieza.
Tras contagiarnos con las carcajadas nerviosas y chispeantes
de los pequeños,
y al encontrarnos rodeadas de niños , ingenuidad y pureza
nos sentimos con la energía necesaria
para iniciar una nueva semana.
Emprendimos el regreso a casa, convencidas que nuestra amistad
es un antídoto infalible contra cualquier clase de maleficio.
Ahora a instalarme frente a la pantalla para ver; El diario de Brigitte J.,
tomar cafecito con celeste y alberto, éste último ha quedado huerfano hoy,
en compensación le he comprado una rosca,después el plato de fondo: Sex and the city,panorama sencillamente imperdible.-
bonito relato.
ResponderBorrarsaludos.